Para ahorrar siempre tenemos un pretexto, una razón que para nosotros vale oro o una excusa. Pero la verdad es que ninguna de estas tiene fundamento porque ahorrar es sencillo, solo hace falta fuerza de voluntad –para vencer los deseos y las tentaciones– , tener información sobre el mercado y las medidas económicas, y un motivo que de verdad te mueva, te cambie y te inspire para hacer hasta lo imposible por lograr tu objetivo. Sabemos que siempre tienes algo que decir con respecto a guardar tu dinero, pero veamos si podemos cambiar eso por una razón válida para llevar a cabo este esfuerzo.
Te mostramos solo las entidades que SÍ te darían tu microcrédito. ACCEDER
Las deudas te impiden ahorrar. Las deudas aparecen cuando no tienes un plan financiero establecido, no tienes presupuestos y gastas mucho más de lo que ganas. Haz una lista de todos tus gastos en un tiempo considerable. Establece tus prioridades y necesidades reales (considera todo aquello que te hace verdaderamente feliz dentro de lo esencial para no sacrificar tu estilo de vida) y elimina lo que sobre de tus gastos. De esta manera, las deudas desparecerán por sí mismas. Además prueba con este tip: cuando llegue tu ingreso, guarda una parte (10% es lo recomendable) y hazlo como si estuvieses haciendo un pago normal. De esta forma, nunca te verás tentado de usarlo porque no te darás cuenta que lo tienes ahí guardado.
Vivir el ahora. Establecer unas metas fijas, fuertes y específicas te ayudará a tener siempre en mente tu objetivo y a pensar en él en cualquier momento de tentaciones o deseos. Piensa en lo que te has propuesto, en lo que de verdad necesitas, en todo el esfuerzo que llevas acumulado. Piensa en el mañana, en tu futuro, en cómo tu dinero guardado te hará sentir orgulloso. Una emergencia la puedes solucionar de otra forma que no sea con tus ahorros. Solicita un microcrédito en la empresa de tu preferencia, elige la cantidad de dinero que necesitas y el plazo en el que lo devolverás y en cuestion de minutos, tendrás el dinero en tu cuenta. Dinero fácil, rápido y muy efectivo. Disponible de inmediato para cualquier imprevisto sin necesidad de tocar tus ahorros.
Los antojos. Los gastos tipo hormiga, aquellos que son poco a poco, terminan arrastrándolo todo… Queramos o no. Sin que te des cuenta son una pérdida significativa de dinero. Sincérate contigo mismo. Piensa en tus prioridades y en la versión grande de todo. No dejes que lo más pequeño destroce algo increíble.
